Una casa es un proyecto de vida levantado por sus habitantes. Es un espacio tridimensional que envuelve la existencia del ser humano y la dota de íntima significación, ganada a través de las experiencias vividas, de los objetos que acompañaron la existencia, de los acontecimientos que tuvieron lugar en ella.
La casa Sorolla culmina y corona el proyecto de vida personal y la trayectoria profesional de un pintor que alcanzó las más altas cotas de genialidad y excelencia creadora. Esta casa representa el firmamento de Sorolla, nos muestra la dimensión íntima y personal del artista y de su familia: sus estancias de pintura, sus objetos más cercanos, sus recuerdos, sus vivencias, sus espacios y rincones… La casa tiene alma.
El fotógrafo Lluís Casals nos muestra su personal visión de la casa Sorolla proponiéndonos un recorrido poético-visual por este universo personal. A través de sus fotografías nos trasmite con perfección la atmósfera de esta casa detenida en el tiempo.
La casa Sorolla es un templo laico dedicado al arte, a los sentidos y a la belleza. Y Lluís Casals perfecciona nuestra contemplación, nos educa la mirada hacia la búsqueda de esa belleza.