Los palillos o castañuelas representan uno de los instrumentos musicales más simples y antiguos de todos los que han llegado hasta nosotros.
El taller expuesto fue donado por el sevillano Manuel Vela Martínez, conocido popularmente como Filigrana. Es sin duda el artesano de este género más popular en Andalucía y sus palillos se conocen con su sobrenombre.
A pesar de la simplicidad de estos instrumentos, las técnicas de su fabricación requieren un estudio y experimentación notables para sacar la mayor sonoridad, tanto a la madera usada con mayor frecuencia «el granadillo», como a otros materiales de introducción más reciente. Esta calidad en el sonido es la que demandan los profesionales del baile clásico español y del baile flamenco garantizando así la pervivencia de este oficio.