En el año 1169, el joven Alfonso VIII, apoyado por los Laras y los ejércitos concejiles de Alcalá, Guadalajara, Atienza, Toledo, Soria y Avila, más el apoyo de los caballeros calatravos, consiguió recuperar Zorita para la corona castellana. Al año siguiente, en 1170, Alfonso se casó con doña Leonor de Inglaterra, y le ofreció en arras el castillo y lugar de Zorita. Poco después, en el año 1174, Zorita fue entregada a la Orden de Calatrava, que la recibió en la persona de su maestre don Martín Pérez de Siones, quien lo convirtió en cabeza de una Encomienda, transformándolo en un firmísimo bastión pleno de tropas, caballeros y armamentos.