A partir de procesos experimentales de traducción y amplificación de fuerzas físicas que, antes de la aparición del ser humano, han transformado la esfera terrestre, esta instalación robótica funciona como un ejercicio de punción electro geomántica, invitándonos a trasladar nuestra percepción del tiempo humano hacia tiempos geológicos milenarios. Resonancia de partículas en el tiempo utiliza como eje central el fenómeno de la erosión, con el estruendo de rocas golpeándose por medio de cuatro máquinas, que modifican su comportamiento a través de la lectura de partículas de polvo en el ambiente. Haciendo uso del movimiento, la luz y el sonido, el proceso de erosión se amplifica, expresando la afectividad y vitalidad de los suelos, contra el relato del “progreso moderno” extractivista que viven los territorios del continente suramericano. La tecnología se despliega como una interfaz que permite revelar aquellos mecanismos escondidos de co-operatividad y co-creación entre lo humano y no humano. Fuente: Catálogo Premio Itaú Cultural Artes Visuales 2019-2020.