Los bienaventurados, se sitúan a la derecha, representados como niños desnudos que en su tránsito hacia la gloria son parcialmente cubiertos por los amplios ropajes de los ángeles que los llevan en brazos. En el tornalluvias de la arquivolta mayor se encuentran unas figuras imberbes, vestidas con túnicas que también se dirigen hacia la visión celestial del tímpano.