Esta sagrada conversación entre los dos hermanos inspiradores de las ramas masculina y femenina de la orden religiosa benedictina proviene de la colección del padre Pere Valls (1848-1925). Es un ejemplo de las copias que el autor hizo de las artificiosas invenciones barrocas del pintor napolitano Luca Giordano (1634-1705) durante su estancia a la Academia de San Fernando de Madrid.