La escuela gaditana neoclásica destacó gracias al motor que representó la creación de la Escuela de Nobles Artes, posteriormente Academia. Los pintores gaditanos Manuel Montano y Victoria Martín ilustran perfectamente las principales características de la pintura neoclásica: dibujo lineal y acromía del color. Este autorretrato de Victoria Martín está a la altura de las mejores obras francesas, de la escuela de David, de la época.