Autorretrato realizado por Ramón Acín (Huesca, 1888-1936), pintor, escultor, caricaturista, pedagogo, entre otras muchas facetas que cultivó. Este autorretrato presenta una posición frontal del artista, con su cabeza cubierta por una boina negra. Presenta unos rasgos faciales muy marcados, acusados además por la sombra que modela el rostro. La figura sobresale del fondo neutro del lienzo, en contraste de tonos anaranjado y negro, con mirada profunda y dura y fuerte expresividad.