Colección de 120 sudaderas intercambiadas, compradas, donadas, una a una con trabajadores abordados al azar en la calle, yendo o viniendo del trabajo, o incluso mientras trabajan.
La obra puede interpretarse como una reflexión sobre el trabajo y los trabajadores, destacando la importancia y la dignidad del trabajo manual, muchas veces pasado por alto en la sociedad. El trabajo también puede verse como una crítica de la desigualdad social y la explotación de los trabajadores, especialmente en los países en desarrollo, donde el trabajo manual a menudo se devalúa.
En resumen, se trata de una obra de arte que destaca la importancia del trabajo manual y de los trabajadores, al mismo tiempo que hace una crítica social a la desigualdad y la explotación laboral.