Lápida funeraria de Actius

Placa epigrafiada de caliza violácea con inscripción métrica del mirmilón ´Actius´, dedicada por su esposa. Presenta la parte superior y el lado derecho pulimentados y el resto desbastados. La inscripción está trazada en forma apaisada, grabada en hueco, en seis líneas con letras de entre 1,5-4 cm. Interpunción triangular; en forma de gancho en las líneas 1-2 (el del centro de la línea 1 doble) y con forma de hoja de hiedra al final de la línea 1. Pueden observarse las líneas de pauta. Hay que suponer un error del lapicida que, atraído por el ´MORTVO´ de la precedente y siguiente, iba a escribir la misma palabra en lugar de ´MIHI´, apareciendo la primera ´I´ cruzada por una ´O´ que debió grabarse distraídamente y cuyos trazos no fueron luego anulados. Las inscripciones funerarias de gladiadores muertos en combate es una de las más completas conservada en Hispania. Fechados entre los siglos I y II, proceden del área ocupada por la necrópolis oeste de Córdoba, donde fueron hallados en un espacio reducido. Esto indica que pudo existir una zona delimitada dentro de esta necrópolis dedicada específicamente a los gladiadores y muy próxima al anfiteatro. En general, estos epígrafes funerarios nos ofrecen información sobre aspectos tales como: la procedencia del gladiador, su especialidad en la arena, los vínculos afectivo-sociales, edad de defunción, etc.Todos estos datos nos permiten acercarnos más al conocimiento de la compleja sociedad de la Colonia Patricia Corduba y de algunos de sus habitantes. La transcripción es: Actius, murmillo, venció seis veces. Murió a los veintiún años. Está aquí sepultado. Séa(te) la tierra leve. Su esposa, y a su propia costa, hizo este monumento a su marido. Lo que cualquiera de vosotros desease para mi ya difunto, eso mismo hagan los dioses con él esté vivo o muerto.