El Convento de San Antonio de Padua ubicado en Izamal, Yucatán, fue el quinto convento construido en el actual estado de Yucatán, México. Fue edificado entre los años 1549 y 1561 en la población yucateca fundada en el siglo IV, dedicada a Zamná.
El convento fue fundado por los franciscanos, encabezados por Fray Diego de Landa y construido en lugar de la pirámide Pop-hol-Chac, cuyas piedras se usaron de material para el nuevo edificio. La pirámide Pop-hol-Chac era la más alta de las seis plataformas prehispánicas que se encontraban en Izamal, lo que hasta la fecha permite que el convento sea visible desde distancias lejanas. y en su época facilitaba a los franciscanos el control del lugar, al dominar gran parte del paisaje.