Capitel de pequeñas dimensiones cuya morfología se inspira en el orden compuesto clásico. De cesto cilíndrico con astrágalo decorado con motivo sogueado, la parte inferior del equino muestra una hilera de hojas esquemáticas paralelas, sobre las que se dispone una inscripción hebrea. Le sucede a media altura una hilera de piñas entrelazadas a modo de guirnalda, sobre las que se sitúan en cada una de las cuatro caras del capitel inscripciones en árabe. Las volutas se configuran mediante las colas enroscadas de una especie de reptil. El ábaco se decora con elementos vegetales y geométricos y en el centro de cada costado posee una cartela, tres de ellas con formas geométricas y una cuarta representando un cuadrúpedo.
La pieza es doblemente excepcional por su iconografía que carece de paralelos conocidos, así como por su carácter bilingüe. Las manifestaciones materiales de la población hispanojudía de la Península Ibérica constituyen un elemento fundamental en la diversidad socio-cultural de Edad Media hispánica.