Longitud: 10,3 cm. Anchura: 4,4 cm. Grosor: 0,2 cm. Hebilla de placa rígida sin charnela de articulación. Está realizada a molde y responde a un modelo habitualmente fechado en el siglo VII. Su forma es un rectángulo con doble calado, el circular para enganchar la aguja o pestaña y el alargado para el paso de la correa. En la cara posterior posee cuatro anillas soldadas para coserlo al cinturón. Está decorado a finos golpes de buril en su cara externa tras el proceso de fundición. Representa dos grifos afrontados bebiendo en la fuente de la vida, símbolo de la resurrección. Este tema, el de dos animales (grifos, caballos, ciervos, pavos…) enmarcando una pila de la que mana agua, es muy frecuente durante todo el periodo paleocristiano y alto medieval.
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