San Anselmo de Chignin fue el séptimo general de la orden cartuja, a él se debe la unificación y constitución real de la orden en 1142. Después de rehusar a ser nombrado obispo de Belley, el Papa Alejandro III le obliga a aceptar el cargo. La escena del cuadro narra el momento en que el propio papa consagra a San Antelmo imponiéndole la mitra sobre la cabeza en presencia de otros dos obispos también cartujos, de los cuales se puede identificar a San Hugo de Lincoln como el joven obispo que mira hacia el espectador. Contempla el acto un monje cartujo con amplia tonsura, que viste la capa negra utilizada fuera del convento, bajo la cual se deja ver el hábito blanco de la orden. Completan la escena tres presbíteros arrodillados que visten el característico sobrepelliz. Al fondo, bajo un dosel se disponen diversos objetos de orfebrería simétricamente distribuidos. La tiara situada tras el papa nos indica la dignidad de este personaje.La vinculación de Carducho con Granada se explica a través del Monasterio de la Cartuja y de Sánchez Cotán. Cuando el prior de la Cartuja del Paular de Madrid, la casa madre de la orden en España, le encarga la ejecución de un ciclo de 56 pinturas con temas relacionados con la orden cartuja para decorar el claustro mayor, Carducho visita la cartuja granadina para conocer en persona a Sánchez Cotán, que aún vivía, y estudiar las obras de contenido análogo que había realizado años antes. El ciclo del Paular fue ejecutado por el nutrido taller de Carducho entre 1626 y 1632 y, basándose en ellos, realizó otra serie más reducida para la Cartuja de Granada, cuyos cuadros guardan tal similitud con los del Paular que se les puede considerar como réplicas.Nacido en Italia en 1576, Vicente Carducho llegó siendo un niño acompañando a su hermano Bartolomé, también pintor, el cual vino a España atraído por la gran demanda de mano de obra que exigía la decoración al fresco del Escorial. Educado en el círculo de los pintores italianos establecidos en Madrid, adquirió gran notoriedad, llegando a ser el pintor más destacado de la corte hasta la llegada de Velázquez, con quién estableció una feroz rivalidad.