Cornisa

Ménsula romana conformada por una gran hoja de acanto que se despliega en la zona inferior de la pieza. Es de siete lóbulos y cinco hojitas cuyos extremos forman zonas muy alargadas y casi verticales. A sus lados se colocan dos pequeñas flores que nacen de sendos tallos. El pulvino tiene una cuerda en su eje. La pieza se corona con un cimacio lésbico de hojas dentelladas que alternan con otras lisas. Los laterales tienen un sencillo relieve de roleos acantiformes sobre un adorno en forma de S decorado con un motivo a cuerda. Todos los elementos más singulares del edificio presentan cierto "horror vacui" y son profusamente esculpidos, es esa labra la que nos permite adscribirlo al periodo flavio (S. II). Tambien las dos pequeñas flores colocadas en los huecos que deja la hoja de acanto, así como el uso del ´scherenkymation´ (moldura que rodea la composición) coronando la ménsula. La hoja de acanto, que ocupa casi la totalidad de la pieza, se puede comparar con capiteles compuestos de Tarragona de esta misma cronología. Con seguridad, la pieza perteneció en origen a un edificio público de gran entidad situado en el foro colonial, posiblemente en un edificio con una gran piscina o alberca, pudiendo interpretarse como parte integrante de unas termas.