Instrumento musical de viento con lengüeta doble. Realizado en madera de boj con aplicaciones metálicas. Consta de un tubo cónico con ocho agujeros (siete en el frente y uno en la parte trasera) y otros dos en los laterales de la parte inferior (vientos). Se suele tocar acompañada de un atabal, y es habitual la composición de tríos con una segunda dulzaina.
La dulzaina sin llaves también es conocida como gaita en Navarra, donde es un instrumento muy característico de las fiestas locales, desde el Ebro hasta el Pirineo, así como en Rioja. Sin embargo, apenas aparece en la Navarra atlántica. Aunque menos, también se toca en Gipuzkoa y Bizkaia, y desde los años 70 del s. XX existen agrupaciones en Baja Navarra y Lapurdi.
Esta pieza es obra del artesano navarro Tomás Peñalba, El Chino (Pamplona, s. XX) y pertenece a la colección X. Otero de la Diputación Foral de Gipuzkoa.
Bibliografía:
Beltran, Juan Mari. Soinutresnak euskal herri musikan. [Hernani] : Orain, 1996. 81-86.
Número de inventario: GFA-022006-001