Enrique Borja —escribió Jomi García— “ […] resulta incluso para mí el delantero más imaginativo, audaz, insensato, y esteta que haya dado el futbol mexicano. […] Sí, ya sé que era torpón con el balón, como lo fue en sus tiempos uno de los más grandes goleadores de la historia: Isidro Lángara. ¿Y qué? Metía goles improbables, descabellados, y a veces —aún lo creo— imposibles.” Jomi García, “Arte fotográfico futbolístico mexicano”, 1985.