"Un bosque imaginario se abre para Luisa (Ernestina Garfias) cada vez que canta el vals de Strauss dedicado a Los bosques de Viena. Me fascinó mi propósito de emplear los números musicales para incursionar en el mundo de los sueños. Esta idea me entusiasmó. Recuerdo que frecuentemente interrumpía mi trabajo en el guión para exclamar: ¡esta! ¡esta es mí película!"