Para 1901, cuando realizó este autorretrato, Everett Shinn era un aclamado ilustrador y dibujante al pastel cuya brillante paleta impresionista era muy popular. En este dibujo despliega su personalidad teatral en tonos apagados, colores vívidos y postura cabizbaja. Sabiendo que de un artista se espera cierto grado de dramatismo, aquí asume el papel de un romántico taciturno y rinde homenaje en una inscripción a la célebre actriz Julia Marlowe.
En 1908, este artista —recordado como miembro de la Escuela Ashcan, grupo dedicado a pintar escenas urbanas— envió un boceto de sí mismo posando para fotos publicitarias a otro artista de la Ashcan, John Sloan. “Muy divertido, ser un artista con temperamento”, escribió Shinn en broma.
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