Jarra de paredes finas y en forma de ánfora de dos asas, soplada al aire en vidrio de tonos azulados, con base anular, cuerpo globular que se estrecha en el cuello y rematado por una boca engrosada. La superficie de la pieza muestra una serie de irregularidades (estrías, burbujas, gotas,...) provocada por una mala aplicación de la técnica de producción del vidrio, soplado al aire. La jarra apareció en el recinto de la necrópolis de Las Pozas (Monturque) junto a otras piezas de vidrio y barro, de ahí que se relacionen con los banquetes fúnebres o el rito de la incineración.