Crátera griega utilizada para contener los huesos cremados de un enterramiento de la necrópolis de la Puerta Norte de Cástulo.
En su interior se halló un anillo de bronce como pertenencia personal de la persona allí enterrada. La crátera se localizaba en el centro del conjunto de piezas que componen el ajuar de la tumba.
Se trata de cerámica ática de figuras rojas, decorada con figuras rojas y blancas sobre fondo negro. Se trata de una pieza de gran calidad tanto en su forma modelada como en su decoración iconográfica, donde encontramos un claro ejemplo de la reinterpretación de las escenas mitológicas griegas que se realiza desde el mundo ibero.
La cara principal reproduce una escena de grifomaquia en la que destacan dos grifos rampantes luchando contra los Arimaspos; y en la cara posterior encontramos una escena de palestra, en la que representan jóvenes vestidos con himatión. Ambas caras están enmarcadas en su zona inferior por decoración geométrica, destacando las palmetas existentes debajo de las asas. En el pie se conserva un grafito, probablemente del comerciante.