De la mano de los constructores Antonio de Gaztañeta, Ciprián Autrán y Juan Pedro Boyer, un nuevo sistema constructivo denominado "a la española" se impuso en los arsenales de la nueva flota borbónica a lo largo de la primera mitad del siglo XVIII.
Este modelo de buque sigue las proporciones de Antonio de Gaztañeta. El constructor y marino puso toda su sabiduría en la creación de la nueva flota, y con su "sistema Gaztañeta" mejoró los cascos y determinó las proporciones adecuadas para conseguir tanto una mejor gobernabilidad como una mayor solidez.
Este medio modelo es una réplica construida por Jesús María Perona Lertxundi en base a un original perteneciente a una colección privada.