Reproducción de una lámpara de Hánuka realizada a partir de unos fragmentos del siglo XV aparecidos en la plaza de la Judería de Teruel en 1977.
En ella se conjuga la tradición judía con la decoración, barnices y colores característicos de la cerámica turolense. Los receptáculos están montados sobre un soporte cerrado, que hace las funciones de bandeja recogeaceite mediante tabiquillos. La original conserva tres de los nueve receptáculos y está decorada a ambos lados de los picos con los característicos ojos de la cerámica popular turolense; en los laterales y en el frente lleva una decoración en morado a base de motivos geométricos.
Estas lámparas son encendidas durante la fiesta de Hanukkah o fiesta de las luces. El origen de esta fiesta se remonta a la época en que tuvo lugar la revuelta Hasmonea; desde entonces, el pueblo judío conmemora la purificación del templo tras la victoria de los macabeos sobre los griegos seléucidas en el año 165 a. de C.
La fiesta de las luces comienza con el ritual del encendido de la primera vela el día 25 del mes de Kislev, encendiendo cada día una luz más hasta completar los ocho días de fiesta.