La obra de Liam Gillick supone una reinterpretación del Arte Conceptual y del Minimalismo, en los que se inspira. Su actividad como crítico, escritor, diseñador, comisario, cineasta, profesor y artista visual permea sus obras, que se entienden mejor como conjuntos de ideas que como objetos individuales. En 2009, Gillick representó a Alemania en la Bienal de Venecia, con el proyecto ¿Cómo te vas a comportar? Un gato de cocina habla. La instalación consta de un conjunto de cintas de plástico de colores que caen sobre la puerta de entrada a la galería mientras que, en su interior, una sencilla cocina modular de pino remite a la “cocina Frankfurt”, diseñada a mediados de la década de 1920 por la arquitecta y activista antinazi Margarete Schütte-Lihotzky. Sobre uno de los armarios, como si hubiera adoptado la voz del artista, habla un gato disecado; este recurso permite a Gillick introducir un elemento narrativo en la obra sin sugerir una presencia sobrenatural o espiritual.