Una coreografía de sonidos dirige las imágenes que proyecto. Veremos el resultado de la rigidez industrial: su violencia, la tenacidad de los grupos de poder, sus congresos carentes de humanidad, la desesperación con la que se agarran de lo material, y luego, la disolución futura de sus poderes.
Con la asistencia de la tecnología en mi trabajo de video arte, los símbolos del caos emergen, representando la ruptura de los sistemas de poder, los efectos originados por la ambición desmesurada, todo lo cual implosiona y amenaza a los grupos dominantes, vemos entonces puntas de acero apuntándolos, que son en realidad lo que ellos mismos han generado.
De repente, símbolos místicos emergen, atmosferas mágicas y constelaciones para asistir al agua: signos de Rosacruces y Masones, símbolos del conocimiento de las Hermandades que provienen de una sabiduría universal, de almas trascendentales. Esa sabiduría no había sido bien usada, fue alterada por los grupos de poder en su beneficio y sometida a sus propios intereses.
Pero, al final afortunadamente somos testigos de como la naturaleza resurge, como su fuerza se impone, como se rebela y arrasa con centros financieros, dejando a las mafias capitalistas en la oscuridad, y ella protesta sin limites, porque la Tierra no resiste mas la borrachera del capitalismo.
Es tiempo de una larga terapia…”