A fines de los 50, Antonio Berni, quien ya era reconocido en el medio por haber creado el Nuevo Realismo en los años 30, y siempre preocupado por la realidad social de su país, concibió un personaje: Juanito Laguna, un niño que vivía en una villa miseria, que sería protagonista de una larga serie que culminó en 1978, con obras como este "Juanito dormido". Para personificar a Juanito Laguna y su entorno, el dibujo y la pintura no le bastaban. Retomó el collage de los años 30 y el grabado en madera, pero de una manera diferente, utilizando materiales “reciclados”, resignificándolos. En el caso de este "Juanito dormido", Berni también utilizó latas y prendas de vestir, como una camisa, medias, alpargatas, un avión de juguete de hojalata, y una revista de cómics, como elementos simbólicos, elegidos expresamente para denunciar la tensión de la realidad diaria y la historia urbana del momento.