En el grabado aparece el ataque a la mansión de Morono. Una lucha implacable con los guardias y sirvientes.
Se puede apreciar como la lucha tuvo lugar tanto en el interior como en el exterior, llegando hasta los tejados de la mansión.
Al fondo de la imagen, en la esquina izquierda, aparece una encarnizada pelea con espadas en alto, representada en siluetas, mientras que en la habitación de la derecha se reproduce el momento en el que los ronin localizan al malvado Morodo.