Iconográficamente las representaciones de los Magos de Oriente han ido evolucionando a lo largo del tiempo. Al principio eran tres jóvenes de aspecto similar. Posteriormente se asociaron a las tres edades del hombre, joven, maduro y anciano, y a finales de la Edad Media se les añadieron los rasgos característicos de las razas conocidas hasta ese momento.
El Museo del Cau Ferrat conserva dos reyes procedentes del retablo de la Epifanía de la catedral de Jaca (Huesca) que responden a la segunda tipología. Representan un hombre de mediana edad y un joven, de pie, a punto de ofrecer los presentes que llevan en la mano. La figura que falta para completar el conjunto, con aspecto de anciano y arrodillado, forma parte de la colección del Museo Diocesano de la Catedral de Jaca.
La majestad propia de unos personajes considerados astrólogos, pero también reyes, se ha potenciado con la profusa utilización del dorado, absoluto protagonista de su indumentaria.