Adquirida por el museo en 1923, se trata de una figura femenina realizada a molde, añadiéndose posteriormente los brazos y parte de su profusa decoración. En su parte posterior presenta un hueco que permitiría sujetarla en posición vertical. Adelanta los brazos con las manos cerradas en actitud de oración. Se decora con motivos vegetales, tanto en la cabeza como en la túnica, en la que destaca la efigie de una gorgona.La Dama de Ibiza se ha identificado con la púnica Tanit, diosa de la fecundidad y el renacimiento, que recoge a los difuntos en la otra vida. También se ha planteado que pudiese ser la propia difunta transformada en la divinidad.
Con seguridad, es un producto de un taller local en un momento en que la compleja sociedad ebusitana afirma sus creencias basadas en una sociedad agraria tomando elementos foráneos de Sicilia o Cartago. Se halló en la necrópolis de Puig des Molins, en la isla de Ibiza.