Las caléndulas o cempasuchil, flores endémicas de México, eran típicas de los jardines mexicanos durante la época de Kahlo. En ocasiones, ramos de esta planta decoraban el comedor de la Casa Azul, su hogar. Hoy en día, siguen siendo populares en la cultura mexicana, ya que forman parte de las celebraciones del Día de Muertos (se cree que ayudan a atraer las almas de familiares y amigos).