Georg Baselitz es uno de los artistas europeos más destacados del período posterior a la Segunda Guerra Mundial y su obra sigue siendo un importante referente para las generaciones actuales. El conjunto de dieciséis pinturas de gran formato La señora Lenin y el Ruiseñor se basa en la repetición de la misma estructura compositiva: dos figuras masculinas invertidas, sentadas una junto a otra, mostrando sus penes y con las manos descansando sobre los muslos. El motivo se inspira en el famoso retrato de Otto Dix Los padres del artista II (1924), pero Baselitz sustituye las figuras de esta composición por las de los dictadores Lenin y Stalin. El primero es retratado como “señora Lenin”, con una falda y zapatos de tacón (aludiendo a su pasión por los disfraces), mientras el segundo, conocido por su voz de cantante y su interés por la poesía, sería “el Ruiseñor”. Cada una de las dieciséis pinturas lleva un título diferente que incluye un juego de palabras o una frase enigmática que aluden, principalmente, a encuentros o reflexiones sobre la obra de artistas modernos y contemporáneos.