Máscara de anciano

En el Templo de las Inscripciones, así llamado por los textos que se observan en sus paredes, Kihnich Janaab’ Pakal ordenó construir un extraordinario monumento funerario que consta de templo-pirámide con una cripta y sarcófago. Una vez muerto Pakal, su hijo, Kan B’ahlam, terminó la construcción, y llevó a cabo los funerales de un hombre de aproximadamente 40 años; selló la entrada a la tumba y esta conservó integro el ajuar funerario hasta su exploración arqueológica. Formaba parte del ajuar funerario en la tumba de Pakal, una máscara formada por 13 fragmentos que ensamblan a manera de mosaico, y que representa el rostro de un anciano, con grandes y profundos ojos, una nariz amplia, prominente; su boca de labios delgados y entreabierta. Cabe notar que el labio superior se adhiere a la encía (como si estuviera remetido) lo cual indica que el personaje carecía de dientes, síntoma claro de envejecimiento. En el rostro del individuo destaca la notoria deformación craneana, diagnostica del típico perfil maya; las orejas fueron representadas de frente y decoradas con orejeras cuadrangulares de medianas dimensiones. Dra. Federica Sodi MirandaColaboradores: Arqlgo. Hugo Herrera Torres Araceli Ruiz Peláez Mtro. Hugo García Capistran.