En este ejemplar vemos un original sistema en solucionar la decoración de cada elemento del capitel. En planta muestra un movimiento de forma poco usual, su base formada por el collarino es circular, el cálatos octogonal tendiendo a abrirse en su parte superior, y el cuerpo superior, es también facetado con ocho caras. En su base arranca con el collarino de perfil semicircular como es ya tradicional en el período nazarí. El cuerpo que ocuparía el cálatos en este ejemplar, es ocupado por una solución de arcos de herradura cerrados, que apoyan en columnitas completas con basa, fuste y capitel, y sobre ellas se dividen a cada lado y trasdosando el arco, en palmas que al chocar con su homóloga se enroscan, sirviendo de base a un fruto abombado. Ocupando el espacio restante en la parte superior y dirección descendente, parten tres frutos abombados enmarcados por palmas.