Siguiendo el modelo francés de las iglesias de peregrinación románicas, el espacio interior de la Catedral de Santiago se organiza sobre la tradicional planta de cruz latina con tres naves por brazo. La nave principal mide de Oeste a Este unos 94 metros de largo en el interior y el transepto, mucho mayor de lo habitual en las iglesias de peregrinación, alcanza los 63 metros de Norte a Sur, unas dimensiones que convierten a esta catedral en el mayor templo románico de España.