Ofrenda de agradecimiento después de la cosecha del maíz.
En esta ofrenda se realizó un florecimiento al maíz; se realizó durante el día junto a la parcela se fue limpiando el lugar con incienso y con gran respeto se pidió permiso a la planta de maíz para tomar las mazorcas y colocarlas con mucho respeto en la ofrenda, posteriormente se cubrieron de flores, realizando cantos y rezos de agradecimiento por cada uno de los participantes. Se recogió la ofrenda en canastas de palma adornando las mazorcas con flores, se realizó un peregrinaje a un cerro y colocándolas en el lugar más alto para que estén más cerca de el gran espíritu.