En plena Ribera del Duero nos encontramos con Portia, la bodega diseñada por el prestigioso arquitecto británico Norman Foster, "el corazón de una flor con tres pétalos". Un proyecto arquitectónico espectacular que se ha convertido en símbolo de la unión entre vino y vanguardia.
En el botellero de Bodegas Portia el vino finaliza su proceso de envejecimiento en botella para adquirir los últimos matices. Se trata de un diseño también del propio Foster donde cada botella es colocada una por una de manera manual al estilo de las antiguas bibliotecas clásicas.