Puntero de plata repujado utilizado para seguir la lectura de la Torá, el Libro de la ley judío, durante el culto.
El eje tiene estrías e incrustaciones de piedras semipreciosas en forma de lágrima rojas y blancas. En un extremo presenta un recipiente esférico para perfumes (besamim), decorado con rosas, hojas de acanto y una breve inscripción en hebreo.
Sigue la tipología típica de estos elementos, realizado en plata y acabado en una mano con el dedo índice extendido.
La función del puntero o “yad” (palabra que en hebreo significa “mano”) es la de auxiliar a la lectura sin tener que tocar el texto sagrado, evitando así que sea impurificado.