La pintura pertenece a una de las tablas que componen el retablo de la Resurrección de las Canonesas del Santo Sepulcro de Zaragoza. La escena está inspirada en el evangelio de San Marcos y en los apócrifos de la Resurrección. La figura central de Cristo con el lábaro de la Resurrección en la mano conforma con el sepulcro una escena simétrica en forma de T invertida, esta tabla sería la titular del retablo y estaría situada en el centro del mismo. El pintor Jaime Serra es el representante del estilo italogótico en Cataluña, junto a sus hermanos Pedro, Francisco y Juan también pintores.