La obra pictórica de Josep Pineda Guerra como retratista representa el mejor ejemplo de esta disciplina en España. Pineda es probablemente el mejor retratista de barcos y el más prolífico. La perfección en la confección de los detalles tiene un gran realismo, comprensible por su formación y su experiencia como navegante. En él se combinan habilidad técnica, pasión por el mar y conocimientos navales. En esta pintura el autor representa una regata con balandros y otras embarcaciones deportivas.