Los numerosos cuadros con el tema de la Anunciación que El Greco pintó nos permiten estudiar la evolución de su estilo pictórico a través del episodio bíblico. Esta pintura, fechada hacia 1576, se considera una de las últimas versiones realizadas en Italia, a la vez que denota una gran influencia de la pintura veneciana. La Virgen, a la izquierda en el reclinatorio, recibe atenta la visita del arcángel, figura ésta que recuerda por su impronta al Veronés. La luz y el color muestran la admiración del pintor por el cromatismo de las obras de Tiziano, mientras que en el estudio y el tratamiento de los ropajes está patente la huella de Tintoretto. Aquí, El Greco se vale de un escenario arquitectónico sencillo, que enmarca a los personajes con soltura, en un intento de dar veracidad a la escena.