La obra en madera, utilizada después como nuevo modelo, es réplica de un original previo en escayola, hoy en paradero desconocido, aunque muy probablemente destruido.
Por lo que sabemos, se trata de la única escultura en madera que realizó Gargallo.
Como ya indicamos para La Bestia del Hombre, 1904, todos los relieves en escayola que formaban el conjunto sobre las virtudes y pecados capitales (protagonistas principales de la primera exposición individual de Gargallo, celebrada en Barcelona en 1906) fueron probablemente destruidos en la década de los años 20, conservándose documentación fotográfica de sólo cuatro de ellos, incluido este.
Aun cuando existen también abundantes matices diferenciadores, resultan evidentes las relaciones, por otra parte lógicas si consideramos las fechas de realización y las temáticas respectivas, entre estos relieves y los dedicados a las Obras de Misericordia Corporales, que ejecutó Gargallo en 1906-11 para la escalera del Pabellón de Administración del Hospital de la Santa Cruz y San Pablo, de Barcelona, a las órdenes del arquitecto Lluís Domènech i Montaner.