La composición del jarrón se atribuye a Albert Carrier-Belleuse, escultor ornamental de la segunda mitad del siglo XIX. Rodin trabajó en su estudio en varias ocasiones entre 1864 y 1882. El modelado de los cuatro corpulentos titanes y sus poses miguelangelescas llevó a los estudiosos a proponer a Rodin como el autor principal de la base.