El Ayuntamiento de Paris invita a Agatha a presentar un desfile como parte de las actividades programadas para el día internacional de la mujer trabajadora de 2003. Para esta ocasion Agatha creó una coleccion de vestidos escultura que ella definió como «vestidos imposibles». Este vestido paragüas, realizado en raso de seda con purpurina estampada y terciopelo, formó parte de esta colección.