María de Cleofás, o Cleofé, conocida así por ser la esposa de Cleofás, fue una mujer que estuvo presente en la crucifixión de Cristo. Vivió en el siglo I y fue una de las mujeres discípulas de Jesús de Nazaret. Si se la identifica con la "María, madre de Jacobo y José" de los sinópticos, sus hijos habrían sido esos y posiblemente otros más.
María de Cleofás fue una de las santas mujeres que acompañaron a Jesús en sus viajes. Asistió a su suplicio y a su entierro, y fue también una de las primeras que lo vieron después de resucitado.
Existe cierta discusión respecto a la existencia de parentesco entre María madre de Jesús y María Cleofás. La discusión surge debido a la posible ambigüedad en torno a la interpretación de Juan 19:25: «Su madre, y la hermana de Su madre, María, la mujer de Cleofás». La tradición católica suele estar definitivamente a favor al respecto.