“El hombre, por su naturaleza, es un ser esencialmente religioso, principalmente un artista del porte de Portinari.”
Antonio Bento
Sacred Heart of Jesus (1940) de Candido PortinariProjeto Portinari
Se proclamaba materialista, pero los santos, seguramente, no le creían. Quien pintó aquella maravillosa Pampulha, quien tenga el don de transmitir lo místico en un San Francisco, quien expresó. Como solo Candinho lo hizo, la tortura y la vocación de santidad, en sus figuras, mucho rezó a través de sus paneles.
Dinah Silveira de Queiroz
The Last Supper (1950) de Candido PortinariProjeto Portinari
“Portinari fue igualmente un gran pintor sacro. La serie de obras que hizo sobre el género posee, más allá de todo, un significado especial. Encierra, por decirlo así, el ciclo áureo de la pintura sacra de toda la historia del barroco brasileño. (…) es en Portinari que se encuentra el más completo artista de este estilo, en todo el conjunto de nuestras pinturas religiosas.
Antonio Bento
Nativity Scene (1931) de Candido PortinariProjeto Portinari
Si confrontáramos, por ejemplo, a dos representantes geniales de la pintura moderna o contemporánea, la de un Marc Chagall y la de un Candido Portinari, encontraríamos en ambos la representación palpable y visible de esos caminos diferentes, pero no opuestos, de traer el cielo a la tierra, lo invisible a lo invisible, lo eterno a lo moderno, Dios al hombre, o el hombre ascendiendo a Dios (…) en Candido Portinari vamos a encontrar un creador accidentalmente religioso, pero un arte intencionalmente sobrenatural, en que el genio del pintor parte de las cosas visibles, de los personajes tangibles, para llegar al tema sobrenatural, de la presencia visible de Dios en las cosas, en los hechos y en los hombres, que caracteriza al arte religiosa del Renacimento, cuando el teocentrismo espontáneo medieval comenzó a pasar al antropocentrismo o al mundanismo del arte religioso intencional, moderno o contemporáneo.
Alceu Amoroso Lima
The Transfiguration (1952) de Candido PortinariProjeto Portinari
El arte religioso de un Portinari me parece indirectamente derivado de la pintura religiosa renacentista, pero colocada en un ambiente trágico, y no deslumbrado por la forma y optimista, como el de esos pintores o artista renacentistas en general, a los que les encantaba descubrir el mundo sin tener que renegar a Dios.
Alceu Amoros Lima
Saint Sebastian (1952) de Candido PortinariProjeto Portinari
Portinari es uno de los descendientes de ese antropocentrismo, pero con una acentuación trágica y brasileña que lo torna absolutamente singular (…)
Alceu Amoroso Lima
Divine Shepherdess (1944) de Candido PortinariProjeto Portinari
La paradoja de un pintor como Portinari, personalmente privado de una fe religiosa distinta o confesional, pero estéticamente capaz de pinturas maravillosas, tan diferenciadas que son expuestas en este volumen, y otras tantas de tipos diversos, pero todas igualmente geniales en el objeto de su creación, siempre me impresionó (…)
Saint Lucy and Saint Peter (1941) de Candido PortinariProjeto Portinari
... en 1956, cuando fui a Riberião Preto y a Brodowski, en busca de desvendar el misterio Portinari, en su infancia y en el ambiente doméstico de su formación adolescente, fue que encontré el secreto de esta aparente paradoja.
Alceu Amoroso Lima
Saint John of the Cross (1944) de Candido PortinariProjeto Portinari
Saint Simon Stock (1944) de Candido PortinariProjeto Portinari
Our Lady of Carmel (1944) de Candido PortinariProjeto Portinari
Sabemos bien que es imposible desvendar lo secreto y lo sagrado de la genialidad. Portinari fue el mayor genio de nuestra pintura. E ni pretendo por nada desvendar el secreto de un genio. Pero, de hecho, el pequeño hilo de la madeja que pienso descubrir en el caso Portinari es el de un arte profundo y esencialmente auténtico y universal, en su vertiente objetivamente cristiana e, incluso, católica, en un artista aparentemente desprovista de un sentimiento religioso personal y explícito.
Alceu Amoroso Lima
Saint Cecilia (1954) de Candido PortinariProjeto Portinari
En el caso Portinari, atribuyo un comienzo de solución de la paradoja a aquella atmósfera doméstica que rodeó su infancia y particularmente su adolescencia, edad humana en la que no se vive apenas esa edad entre 12 y 18 años, sino todas las edades, pues es en la infancia y en la adolescencia que el ser humano vive con antecedencia y lanza los trazos definitivos de su personalidad hasta su muerte. Es en el Portinari de Brodowski que vamos a encontrar el Portinari universal, que se puede y debe confrontar con un Marc Chagall, para hablar del mayor pintor brasileño de todos los tiempos.
Alceu Amoroso Lima
Saint Francis (1941) de Candido PortinariProjeto Portinari
Ese misterio, que siempre me intrigó, era comprender cómo un hombre, sin fe religiosa consciente, podía pintar tan bien, tan maravillosamente bien, lienzos de temas religiosos. Sé bien que las cualidades del artista nada tienen que ver con el objeto del genio creador. Y los parnasianos y naturalistas sostenían, aunque poco lo practicasen, que debían ser dos cosas completamente separadas: el genio del artista y el objeto o tema de su creación. De cualquier forma, sin embargo, siempre me intrigó ese misterio.
Alceu Amoroso Lima
Little Church of Brodowski (1932) de Candido PortinariProjeto Portinari
Y ahora pienso haber descifrado el enigma, conociendo personalmente a la familia de Portinari, sus viejos padres y una de sus hermanas. Así como la casa en que nació, la plaza de Brodowski en la que jugó al fútbol con otros niños (y reprodujo en algunos de sus cuadros), así como la capilla de San Antonio, en el medio de la plaza, con sus bancos toscos como las capillas del sertão (región y bioma brasileños que se extiende desde el sur de Bahía, pasando por Minas Gerais y hasta el norte de São Paulo).
La pequeña ciudad está al comienzo de una colina, con sus calles anchísimas y sus casitas bajas, todo color de barro y barrido por el viento.
Alceu Amoroso Lima
Saint Francis of Assisi (1944) de Candido PortinariProjeto Portinari
El más importante de los murales de Portinari es el de “San Francisco” de Pampulha.
Simon of Cyrene Helps Jesus Carry the Cross, Fifth Station of the Via Crucis (1945) de Candido PortinariProjeto Portinari
Lo que Portinari realizó con el San Francisco de Pampulha es algo extraordinariamente bello, extraordinariamente fuerte, y no encuentra paralelo en la pintura mundial del período.
Saint Francis Casting Off His Clothes (1945) de Candido PortinariProjeto Portinari
En un período en el que ya se creía que la pintura sacra estaba liquidada, ya era algo descartado, y que incluso la pintura mural ya había salido del vocabulario de las manifestaciones artísticas del período, el “San Francisco” de Pampulha surge como un renacimiento de todas las posibilidades de la herencia cultural tanto del pre-renacimiento como del renacimiento y es una evidencia de las posibilidades de la renovación formal de los movimientos de la vanguardia de los siglos XIX y XX.
Israel Pedrosa
Kneeling Woman (1955) de Candido PortinariProjeto Portinari
Solo un hombre cercano a los Evangelios tendría la visión que Portinari tuvo sobre la Guerra y sobre la Paz.
José Lins do Rego
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