Arzobispo Hernando Arias de Ugarte

Hernando (o Fernando) Arias de Ugarte (1561-1638) nació en Santafé y llegó a ser auditor general del ejército en el reino de Aragón y alcalde de corte en la Real Audiencia de Lima. Además, fue obispo de Lima en 1614, obispo de Quito y arzobispo de Santafé, en 1618.

Elementos como el cortinaje rojo del fondo, la mesa al costado izquierdo y la silla al derecho, dan cuenta de la importancia del retratado en la sociedad colonial. La mayoría de estos objetos estaban presentes en los retratos de autoridades políticas o eclesiásticas.

De igual manera, estos objetos evidencian la cultura material que permeaba la cotidianidad en el continente americano. Es el caso de la silla frailera, uno de los muebles más comunes en espacios civiles y eclesiásticos.

El escudo de armas visible en la imagen presenta, en cada uno de los campos en los que se divide, el linaje de Arias de Ugarte, a la vez que pone de manifiesto su estatus social y económico en la sociedad neogranadina.

Una cruz dorada remata el escudo junto con un sombrero del que se desprende un cordón con nueve borlas a cada lado. Estos símbolos se relacionan con la labor de arzobispo de Arias de Ugarte.

El retratado viste una sotana y muceta negra, roquete blanco y birreta sobre su cabeza, prendas que dan cuenta de su posición como autoridad eclesiástica.

Apoyada sobre un libro, destaca en la mano derecha del arzobispo un anillo pastoral, símbolo de autoridad religiosa.
El libro posiblemente hace referencia a su formación en la Universidad de Lérida, España, donde recibió el título de doctor en Derecho Civil y Canónico.

En 1619, con licencia de Felipe III, Arias de Ugarte fundó el convento de Santa Clara en Santafé, cuya construcción acompañó hasta 1625, cuando asumió el arzobispado de Charcas, en Perú. Su hermano Diego y, tras su muerte, su sobrina María, asumieron su posición en el convento

El retrato en la Nueva Granada fue escaso. Una de sus tipologías más interesantes es la que representa autoridades eclesiásticas. Imágenes como la de Hernando Arias de Ugarte muestran el papel de la Iglesia en la realidad económica, política y social americana.