León Ferrari: imágenes escritas y heliografías

Entre las obras más tempranas de Ferrari que integran esta donación, se destacan las que exploran las posibilidades del dibujo como escritura, entre las cuales recibimos La cugujada (1964), un dibujo escrito que forma parte de una amplia serie en la cual León inventa caligrafías contorneadas plenas de sarcasmo y de humor.

Con ellas, Ferrari establece nuevas posibilidades tanto para el arte como para la escritura.

El uso de los calcos le permite a Ferrari sistematizar la representación de la figura humana que, multiplicada en su uniformidad, parecen querer vivir bajo las reglas de un sistema de poder anónimo.

Sobre el papel, infinidad de hombres no dejan de serpentear, de alinearse y de perderse como la línea lo hace en sus dibujos previos.

Estos planos, que León describe como “arquitecturas de la locura”, pueden alcanzar un tamaño de uno por casi tres metros.

Las Heliografías eran reproducidas en ediciones infinitas que León enviaba por correo, con lo que dejaba en claro su interés en distribuir sus ideas lo más ampliamente posible.

El abigarramiento, el enredo, la repetición y el carácter frondoso de todo el trabajo de Ferrari siguen siendo un elemento fundamental.