The Love Letter (ca. 1669 - ca. 1670) de Vermeer, JohannesRijksmuseum
Vemos a una joven elegantemente vestida tocando un instrumento musical. La interrumpe su criada, quien acaba de entregarle una carta. La joven parece nerviosa, como si no estuviese segura de lo que está por leer en la carta.
La habitación está lujosamente decorada, con piso de mármol, pinturas en la pared y tapices de cuero dorados.
A menudo, Vermeer pintaba escenas íntimas como esta, en las que el espectador siente que está presenciando una situación que no se suponía que debía ver. Aquí, la sensación se intensifica al ubicar a las mujeres en una habitación separada y bien iluminada, mientras que los espectadores las observan entre las sombras a través de una puerta.
El Museo Nacional de Ámsterdam adquirió "La carta de amor" en 1893. La obra fue robada en 1971, mientras estaba en exhibición en Bruselas. Afortunadamente, se pudo recuperar la pintura rápidamente, que había sido recortada de su bastidor, y se la restauró con éxito.
Vistazos
Los vistazos como este eran frecuentes en las pinturas del siglo XVII. Vermeer refuerza la sensación de profundidad en la pintura al mostrarnos varias habitaciones, una detrás de la otra. Los vistazos eran una de las especialidades de Pieter de Hooch, un pintor que trabajó en Delft (la ciudad donde también vivió y trabajó Vermeer) hasta poco después de 1660. Es probable que los pintores conocieran el trabajo del otro y Vermeer podría haberse inspirado en De Hooch.
Repoussoir
En su obra, Vermeer juega con el contraste entre la habitación bien iluminada y el espacio sombrío en primer plano. Es difícil distinguir los sujetos que rodean el marco de la puerta.
Un mapa cuelga en la pared izquierda...
...mientras que a la derecha hay una silla con partituras.
La cortina que normalmente cuelga en frente de la puerta está corrida hacia un lado.
Colocar objetos en primer plano era un método artístico habitual, usado para crear la ilusión de profundidad. Este tipo de objeto se conoce como repoussoir. Al colocar un repoussoir claramente en primer plano, Vermeer "empuja" el resto de la escena hacia el fondo.
La carta
"La carta de amor" era un tema popular en la pintura de la Edad de Oro. Esta obra muestra la entrega de una carta, aunque también se pintaban personas escribiendo o leyendo cartas. Vermeer retrató estos momentos. La carta está en la sombra, por lo que se destaca contra la chaqueta amarilla de la mujer.
La luz que cae sobre su rostro dirige nuestra atención hacia su reacción. Es imposible no preguntarse qué dice la carta.
Una expresión expectante
La mujer sentada acaba de agarrar la carta y mira expectante a su criada. ¿Qué noticias de su amante contendrá la carta? Parece temer que no le gustará lo que está a punto de leer.
Sin embargo, la actitud calmada de la criada, su sonrisa amistosa y la mano a su lado sugieren que está segura de que la carta contiene buenas noticias.
Símbolos pintados
Las pinturas arriba de las mujeres parecen confirmar las buenas nuevas.
En el siglo XVII, era común comparar al mar con el amor y a los amantes con un barco. Un mar turbulento indicaba una relación tempestuosa, mientras que un mar calmo era un presagio de amor. La pintura detrás de la mujer muestra un cielo azul y un mar calmo...
...mientras que el paisaje paradisíaco que está encima parece transmitir el mismo mensaje.
Laúd
El laúd era un instrumento popular en el siglo XVII y solía usarse para acompañar el canto. La música y los instrumentos musicales a menudo se asociaban con el amor. Por lo tanto, la mujer tocando música encaja perfectamente en el contexto de la carta de amor. El laúd podía representar distintos tipos de amor, desde fidelidad conyugal hasta lujuria y adulterio. ¿Qué podría representar aquí?
Un poco de desorden
Varios objetos están desparramados en el piso...
...como una cesta de ropa...
...una escoba y pantuflas.
Quizás la joven estaba tan absorta en sus asuntos del corazón que descuidó las tareas domésticas. También es posible que Vermeer haya querido que estos objetos se interpreten simbólicamente. Los zapatos podrían representar la armonía del hogar, aunque también tenían connotaciones más sensuales. La escoba podría indicar una pareja que vive junta, pero de manera extramatrimonial. Sin embargo, ninguno de los objetos ofrece evidencias indiscutibles de que estamos frente a un caso de amor impropio, de manera que la interpretación correcta de la escena sigue siendo incierta.
Pisos de mármol
Desde la habitación desde donde parece que observamos la escena, la hilera de baldosas de mármol blanco guía nuestros ojos hacia las dos mujeres. Las baldosas de mármol aparecen en varias pinturas de interiores del siglo XVII, aunque, en realidad, los pisos de este tipo eran poco comunes. Se encontraban principalmente en las casas de las personas extremadamente ricas y, por lo general, en habitaciones más pequeñas.
Vermeer no pintó el veteado del mármol meticulosamente, sino que usó pinceladas rápidas y sueltas para crear la ilusión de mármol.
Chaqueta de lujo
Vermeer incluyó algunos de los objetos en otras pinturas, como el costoso abrigo amarillo con ribetes de piel que lleva puesto la mujer. La chaqueta también viste a las elegantes mujeres en cinco otras pinturas, como "Dama en amarillo escribiendo" (Galería Nacional de Arte, Washington) y "La muchacha del collar de perlas" (Gemäldegalerie, Berlín). Un inventario de la casa de Vermeer realizado el 29 de febrero de 1676 incluye una chaqueta de satén amarilla con ribetes de piel blanca. Quizá esta es la chaqueta que aparece con frecuencia en sus pinturas.
Firma
Vermeer firmó esta pintura con "IVMeer". La "I", la "V" y la "M" están escritas como una sola letra. La "I" representa su nombre de pila, Johannes. La firma se puede ver en la sección de pared sobre el cesto de ropa, a la izquierda de la falda azul de la criada.
Esta exhibición forma parte del Proyecto Vermeer de Google.
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