Cama de madera sencilla con cierto aire isabelino. Tanto el cabecero como el piecero tiene un moldura y dos pequeños pináculos en los extremos. Se le han añadido barandas para prevenir las caidas.
Esta pieza corresponde al dormitorio de Mª Josefa, la mayor de las hermanas Díaz Velázquez, la que se encargaba de atender a la clientela y organizar el trabajo con las bordadoras. Todo el mobiliario de la habitación tiene un cierto regusto popular.