Teatro de cartón litografiado, formado por varias piezas que se ensamblan para crear un espacio escénico con sensación tridimensional. El teatrillo se encuentra incompleto.
El frente representa un teatro decimonónico de estilo neoclásico, en color blanco y con detalles dorados. Una de las piezas representa el gran telón de terciopelo rojo, recogido con un cordón dorado con un borlón para dejar a la vista el escenario.
Están colocados los decorados de la única obra teatral que se conserva, que se titula "La leyenda de San Jorge", donde se recrea un ambiente árabe con una mezquita en el fondo del paisaje.
Tras el frente escénico, en los laterales, se ha recreado la entrada de los personajes, el puente a los pisos superiores y el sistema de tramoyas para montar los decorados. Hay una inscripción que indica la editorial y el modelo patentado, obra de C.B. Nualart.
No se conserva ningún personaje. Parece probable que el primer "Teatro de los niños" apareciera en 1915 o 1916 de la mano de Seix y Barral. Posteriormente lo comercializaría también Paluzíe.